¡Enhorabuena!, y es que para muchos por fin ha llegado el mes de agosto y con él, las ansiadas y sin duda, merecidas vacaciones. No cabe duda de que afortunadamente, la actual situación del Covid-19 hace que este verano poco tenga que ver con el del año pasado y los que ya hemos podido disfrutar de un breve descanso, hemos visto como las playas estaban llenas igual que los restaurantes, aun así, recordamos no bajar la guardia y seguir alerta frente a esta pandemia. Prueba de esta mejoría es que el verano pasado se cerró con 82,8 millones de desplazamientos de largo recorrido por carretera (40,2 millones en julio y 42,6 millones en agosto) y para este verano, la DGT estima 91,2 millones de desplazamientos (43,3 millones en julio y 47,8 millones en agosto), la misma cantidad que en 2019.
Este año julio cerró con una caída del de 29% y el canal de particulares cerró con un descenso del 42,4%, pese a la reducción en el Impuesto de Circulación
Desde aquí, además de pediros que se revise el coche antes de salir, máxime este año en el que muchos vehículos han estado prácticamente parados, debido a las restricciones de la Covid-19, os pedimos precaución, no ya sólo para evitar accidentes, sino porque bastante cara está ya la gasolina (el año pasado por estas fechas el litro de Super 95 estaba en 1,16€ y el del diésel a 1,06€ y este año a 1,41€ y a 1,27€ respectivamente), como para que encima nos llegue una multa por exceso de velocidad como les ha ocurrido a 29.301 conductores que fueron sancionados por circular a una velocidad superior a la permitida, de los cuales, el 60% lo hicieron en vías convencionales y travesías que, como media, circulaban a una velocidad media de 121 km/h, es decir, 31 km por encima del límite genérico permitido en las vías convencionales.
Prueba de esta mejoría es que el verano pasado se cerró con 82,8 millones de desplazamientos de largo recorrido por carretera (40,2 millones en julio y 42,6 millones en agosto) y para este verano, la DGT estima 91,2 millones de desplazamientos (43,3 millones en julio y 47,8 millones en agosto)
Claro que no todo iba a ser buenas noticias y es que, si el año pasado julio cerró con un crecimiento en las matriculaciones del 1,1%, un dato que puede parecer pequeño pero que fue el primero del año en positivo y el primer mes en dos años en el que el sector de particulares acabó en positivo, este año julio cerró con una caída del 29% y el canal de particulares cerró con un descenso del 42,4%, pese a la reducción en el Impuesto de Circulación. Otro dato negativo que supimos en julio fue el de la producción y las exportaciones de vehículos de junio. Así, la producción cerró junio con una caída del 18% con respecto a 2020, mes en el que recordamos, las fábricas estaban todavía retomando el ritmo de producción tras el parón por la pandemia, porque si lo comparamos con 2019, el dato es aún peor (-21,6%). En un principio, esta caída en la producción sería achacable por todos al descenso de las matriculaciones, que si bien, ha afectado, no es e principal causente, que no es otro que la escasez de microchips, situación que se remonta a finales del año pasado y que está afectando tanto a nivel nacional como europeo. Esta escasez está provocando que los centros de producción se estén viendo obligados a retrasar la fabricación y a efectuar medidas especiales como la suspensión temporal de las líneas de producción hasta que la falta de semiconductores se resuelva. El problema es que según las previsiones, el ritmo de fabricación de estos componentes no se ajustará a la demanda del sector de automoción hasta el primer semestre de 2022. Las exportaciones tampoco se salvan y en junio cayeron un 14,9% con respecto al año pasado , mientras que el primer trimestre del año se ha cerrado con un total de 1.035.609 vehículos, lo que supone un incremento del 30,6% respecto a 2020, pero una caída del 16,1% si lo comparamos con 2019.
!Feliz verano a todos y nos vemos a la vuelta!