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Un enchufable es un híbrido que añade una toma de corriente para alimentación externa. Traducido a nuestra vida de todos los días, suele significar que pasamos la semana entera yendo a trabajar y volviendo… pero sin pisar una gasolinera. Después, con el depósito de gasolina de 55 litros, podemos abordar viajes de cientos de kilómetros durante el fin de semana o cuando no tengamos que ir a trabajar a la ciudad. La ley establece que el híbrido enchufable capaz de recorrer en modo eléctrico 40 kilómetros o más tiene exactamente la misma etiqueta que un eléctrico puro: la 0, que significa gratuidad en las plazas de aparcamiento verdes y azules. En realidad, acarrea ventajas diferentes según la normativa municipal de la ciudad en la que nos encontremos y una de ellas puede ser permiso para circular por el carril bus-VAO. Sin olvidar que los llamados PHEV (los híbridos enchufables) reciben dinero del plan MOVES III con el que la Administración pretende que intentemos ser lo más ecológicos posible cuando circulamos en automóvil.
Su batería es de 18,5 kWh y, teóricamente, se carga por completo en dos horas y media a 7,4 kW. Pero lo más espectacular es esto: he recorrido 79 kilómetros con una sola carga y sin gastar una gota de gasolina. Créanme: esto es muy importante, merece una muy buena nota para un coche de 1.900 kilos
Los compradores pueden obtener 2.500 euros de ayuda a la compra o, si dan de baja otro vehículo, el doble de esa cantidad. Así intenta la Administración romper nuestra inercia a seguir teniendo en casa automóviles de explosión. Intenta que vaya habiendo menos coches de combustión, que generan CO2, y más eléctricos, que no lo generan al circular pero, casi siempre, sí al cargar. Respecto al RAV4 híbrido enchufable, una especie de paso intermedio entre uno y otro tipo de coche, las cosas han mejorado mucho. Su batería es de 18,5 kWh y, teóricamente, se carga por completo en dos horas y media a 7,4 kW. Pero lo más espectacular es esto: he recorrido 79 kilómetros con una sola carga y sin gastar una gota de gasolina. Créanme: esto es muy importante, merece una muy buena nota para un coche de 1.900 kilos. El otro motor, el térmico, es un 2.500 c.c. de 185 caballos, siete más que el que conocíamos porque la electrónica se ha pulido y mejorado con esmero.
La longitud del coche, 4,60 metros, lo coloca en el sector de los SUV de tamaño medio. El aprovechamiento del espacio del habitáculo es bueno y el maletero cubica 520 litros. En resumen: un RAV4 notablemente mejor que el anterior, con retoques estéticos pero con mejor equipamiento. Con una mecánica mejorada, tanto en cuanto a los dos motor es eléctricos como en cuanto al que funciona con gasolina
La unidad de pruebas tenía el acabado Style Plus y eso significa unos sesenta mil euros de coste. Independientemente de que el carácter híbrido enchufable vaya a permitirnos después ahorrar en consumo, sería deseable que este RAV4 no costase tanto. Pero repito que también ofrece más que otros. Para empezar, entre el motor de gasolina y los dos motores eléctricos desarrolla 309 caballos de potencia, lo que lo convierte en un coche rápido que acelera de 0 a 100 en 6 segundos. Este nivel de acabado deja como única opción para pagar aparte la pintura. Incluye una pantalla de 10 pulgadas, sistema multimedia con Apple Car Play y con Android auto, cambio con levas, climatizador automático bizona, cámara trasera, navegador y una larga lista de extras más. Los plásticos y los acabados son bastante buenos. La longitud del coche, 4,60 metros, lo coloca en el sector de los SUV de tamaño medio. El aprovechamiento del espacio del habitáculo es bueno y el maletero cubica 520 litros. En resumen: un RAV4 notablemente mejor que el anterior, con retoques estéticos pero con mejor equipamiento. Con una mecánica mejorada, tanto en cuanto a los dos motor es eléctricos como en cuanto al que funciona con gasolina. Y con buenas prestaciones; muy buenas, si tenemos en cuenta que se trata de un objeto de 1.900 kilos.
La ley establece que el híbrido enchufable capaz de recorrer en modo eléctrico 40 kilómetros o más tiene exactamente la misma etiqueta que un eléctrico puro: la 0, que significa gratuidad en las plazas de aparcamiento verdes y azules. En realidad, acarrea ventajas diferentes según la normativa municipal de la ciudad en la que nos encontremos y una de ellas puede ser permiso para circular por el carril bus-VAO
