Frente a la electrificación, la tecnología de pila de combustible de hidrógeno es una alternativa especialmente para los clientes que no tienen su propio acceso a una infraestructura de carga eléctrica o que con frecuencia realizan viajes largos y es que a diferencia de los largos periodos de carga de un coche eléctrico, un tanque de hidrógeno se puede llenar en tres a cuatro minutos proporcionado una gran autonomía.
El programa intensivo, que se lleva a cabo en condiciones cotidianas, con miles de kilómetros recorridos en situaciones de tráfico reales, ayuda a los ingenieros de desarrollo a validar la eficiencia, seguridad, comodidad y fiabilidad de todos los componentes
En 2013, BMW comenzó a colaborar con Toyota en esta tecnología y en 2019 presentó el BMW i Hydrogen NEXT, un X5 impulsado por una pila de hidrógeno, que ahora ha iniciado sus pruebas en carreteras reales como parte de su desarrollo de cara a su lanzamiento a finales de 2022. El sistema de pila de combustible, los tanques de hidrógeno, la batería de amortiguación de rendimiento y la unidad de control del vehículo central se han probado previamente individualmente y juntos en cientos de pruebas realizadas en bancos de pruebas, pero ahora, con estas pruebas en carreteras reales, BMW busca ajustar el software que controla todas las funciones de conducción y operación.
A diferencia de los largos periodos de carga de un coche eléctrico, un tanque de hidrógeno se puede llenar en tres a cuatro minutos proporcionado una gran autonomía
El programa intensivo, que se lleva a cabo en condiciones cotidianas, con miles de kilómetros recorridos en situaciones de tráfico reales, ayuda a los ingenieros de desarrollo a validar la eficiencia, seguridad, comodidad y fiabilidad de todos los componentes. Al mismo tiempo, la serie de pruebas está diseñada para garantizar las prestaciones de un BMW, incluso de una versión libre de emisiones.