50 años después de que el 312 P hiciese su última aparación en la categoría reina de las carreras de resistencia, Ferrari ha presentado el 499P su prototipo de la categoria LMDh con el que aspira volver a ganar en las 24 Horas de Le Mans. Su debut está previsto en las 1.000 Millas de Sebring, la carrera inaugural del WEC de la temporada que viene, en la que también deburatán Porsche y BMW. Su nombre está ligado a la historia de Ferrari en las carreras de resistencia donde recordemos, Ferrari logró 22 títulos mundiales y 9 victorias absolutas en la 24 Horas de Le Mans y donde sus modelos se indentificaban por la cilindrada del motor seguido de la letra “P”. Además, la librea con la que el 499P debutará incluye una versión del famoso esquema de color del 312 P de los años ´70 para subrayar visualmente la conexión histórica con el último trabajo de Ferrari hace 50 años. Así mismo, uno de los coches de resistencia inscritos estará adornado con el número 50, mientras que el otro llevará el 51, uno de los números de carrera más exitosos de la historia de Ferrari. Sólo falta por saber quienes serán sus pilotos. Además de por los técnicos e ingenieros de Maranello, el Ferrari 499P será gestionado con la colaboración de AF Corse, una asociación que continúa la racha de victorias, que comenzó en el FIA GT de 2006 con el F430 GT2 con el que lograron los títulos de Equipo, Piloto y Constructor en su temporada debut y con quien, Ferrari ha logrado importantes éxitos en la categoría GT del WEC.
Para definir el 499P, Ferrari confió la gestión a Attività Sportive GT, bajo la dirección de Antonello Coletta y la supervisión técnica de Ferdinando Cannizzo, jefe del departamento encargado de la ingeniería y el desarrollo de los coches de carreras deportivos y GT, mientras que su diseño se perfeccionó con el apoyo del Centro de Estilismo de Ferrari bajo la dirección de Flavio Manzoni
Acorde al reglamento de la categoria LMD, el 499P combina una unidad de potencia en la parte trasera con un motor eléctrico que impulsa el eje delantero, con lo que cuenta con tracción a las cuareo ruedas. El motor de combustión interna (ICE) tiene una potencia máxima limitada por la normativa de 500 kW (680 CV) y deriva de la familia V6 biturbo de carretera. El ICE, que comparte la arquitectura del motor montado en el 296 GT3, ha sido objeto de una profunda revisión por parte de los ingenieros de Ferrari, destinada tanto a desarrollar soluciones ad hoc para el prototipo como a aligerar el peso total. Entre las características específicas del V6 del 499P está el hecho de que el motor es portante y, por lo tanto, cumple una valiosa función estructural en comparación con las versiones montadas en los coches GT de competición, en las que el motor está montado en el subchasis trasero del coche. La segunda “alma” de la cadena cinemática híbrida es el ERS (Sistema de Recuperación de Energía) con una potencia máxima de 200 kW (272 CV). El motor eléctrico está equipado con un diferencial y es impulsado por una batería que se recarga durante la deceleración y el frenado, sin necesidad de una fuente de energía externa. El paquete de baterías, con un voltaje nominal de 900v, se beneficia de la experiencia adquirida en la Fórmula 1, aunque ha sido construido específicamente para este proyecto. El tren motriz está acoplado a una caja de cambios secuencial de siete velocidades.
50 años después de que el 312 P hiciese su última aparación en la categoría reina de las carreras de resistencia, Ferrari ha presentado el 499P su prototipo de la categoria LMDh con el que aspira volver a ganar en las 24 Horas de Le Mans. Su debut está previsto en las 1.000 Millas de Sebring, la carrera inaugural del WEC de la temporada que viene, en la que también deburatán Porsche y BMW
Para definir el 499P, Ferrari confió la gestión a Attività Sportive GT, bajo la dirección de Antonello Coletta y la supervisión técnica de Ferdinando Cannizzo, jefe del departamento encargado de la ingeniería y el desarrollo de los coches de carreras deportivos y GT, mientras que su diseño se perfeccionó con el apoyo del Centro de Estilismo de Ferrari bajo la dirección de Flavio Manzoni. Construido sobre un chasis monocasco de fibra de carbono totalmente nuevo, su carrocería está esculpida a partir de una superficie plana, de la que se desarrollan armoniosamente las vainas laterales y los pasos de rueda. Los flujos aerodinámicos pasan por las vainas laterales sobre los huecos entre las crestas principales que rodean el habitáculo, refrigerando los radiadores ocultos bajo la carrocería. Los pasos de rueda cuentas con grandes rejilllas destinadas a reducir la presión en el interior de los alojamientos de las ruedas y, junto con los grupos de faros, imprimen al morro una sensación de carácter y expresividad, con sutiles referencias a los rasgos de estilo introducidos por primera vez en el Ferrari Daytona SP3. Su parte trasera es la máxima expresión de cómo combinar tecnología, aerodinámica y diseño: una sutil piel de fibra de carbono cubre las distintas funciones, dejando completamente visibles las ruedas y la suspensión. La cola se caracteriza por un doble alerón horizontal; el alerón principal y los flaps superiores se han diseñado meticulosamente para garantizar la carga aerodinámica necesaria y lograr el máximo rendimiento. El alerón inferior también cuenta con una “barra de luces” que enriquece el diseño trasero con un toque decisivo pero minimalista. Por último, en una posición dominante sobre el coche se encuentra una toma de aire múltiple que alimenta la admisión del motor V6 y suministra aire de refrigeración a la batería y la caja de cambios.
Acorde al reglamento de la categoria LMD, el 499P combina una unidad de potencia en la parte trasera con un motor eléctrico que impulsa el eje delantero, con lo que cuenta con tracción a las cuareo ruedas. El motor de combustión interna (ICE) tiene una potencia máxima limitada por la normativa de 500 kW (680 CV) y deriva de la familia V6 biturbo de carretera
John Elkann, Presidente Ejecutivo de Ferrari dijo en la presentación: “Con el 499 P volvemos a competir por la victoria absoluta en la serie WEC. Cuando decidimos comprometernos con este proyecto, nos embarcamos en un camino de innovación y desarrollo, fieles a nuestra tradición que ve la pista como el terreno ideal para empujar los límites de las soluciones tecnológicas de vanguardia, soluciones que con el tiempo se trasladarán a nuestros coches de carretera. Afrontamos este reto con humildad, pero conscientes de una historia que nos ha llevado a conseguir más de 20 títulos mundiales de resistencia y 9 victorias en la general de las 24 Horas de Le Mans. “. Por su parte, Antonello Coletta, Director de Ferrari Attività Sportive GT manifestó: “El 499P es un sueño hecho realidad. Hoy es un momento importante para todas las personas que han trabajado tan duro en este proyecto durante los últimos dos años. Hemos querido rendir homenaje a nuestra historia, con muchas referencias, grandes y pequeñas, a un pasado hecho de éxitos y títulos. Sin embargo, lo hacemos mirando al futuro, creando un manifiesto de nuestro compromiso con el campeonato mundial de resistencia. El 499P es un prototipo decididamente Ferrari, en el sentido más amplio del término, y nos produce una enorme emoción mostrarlo por fin a nuestros clientes y a los numerosos entusiastas de la marca“.
Su nombre está ligado a la historia de Ferrari en las carreras de resistencia donde recordemos, Ferrari logró 22 títulos mundiales y 9 victorias absolutas en la 24 Horas de Le Mans y donde sus modelos se indentificaban por la cilindrada del motor seguido de la letra “P”. Además, la librea con la que el 499P debutará incluye una versión del famoso esquema de color del 312 P de los años ´70 para subrayar visualmente la conexión histórica con el último trabajo de Ferrari hace 50 años
