El pasado mes de mayo se matricularon un total de 95.158 turismos, lo que supuso un aumento con respecto al año pasado del 3,4%, un crecimiento que, en su gran medida, se debió al tirón del canal de alquiladores, que registró un crecimiento del 27,1%. Con estos datos, 2024 acumula ya un total de 431.884 unidades matriculadas, lo que supone un crecimiento del 6,8% con respecto al año pasado. Pese a que a priori, estos datos son positivos (de no ser porque el mercado todavía se mantiene un 23% por debajo de los volúmenes de 2019), han saltado las alarmas en lo que a las ventas de vehículos eléctricos se refiere debido a su estancamiento, pues en mayo, sólo se vendieron 9.180 turismos electrificados (eléctricos puros e híbridos enchufables), lo que supone una caída del 11,9% frente a mayo de 2023. Esta cifra sitúa al mercado electrificado en el 9,65% de cuota total, es decir, cerca de dos puntos porcentuales menos que hace un año (los eléctricos puros o BEV, registraron una caída del 0,4%, mientras que los híbridos enchufables o PHEV cayeron un 20,3%). Así, si en el total del año, el mercado crece un 3,5%, con 45.154 unidades, pero su cuota se mantiene estancada cerca del 10% (10,4%), pero cayendo a medida que avanza el año. Una cifra que se sitúa muy lejos del ritmo que debería llevar España para cumplir con los objetivos exigidos de descarbonización, por lo que desde ANFAC hablan ya de la necesidad de estimularlo con medidas efectivas para incrementar sus ventas.
Por otro lado, esos que dicen no sufrir la “range anxiety”, resulta que a la hora de realizar un viaje de larga distancia, el 39% adapta la ruta a la ubicación de estaciones, el 36% recurre a apps de navegación y, el 24% contacta previamente con estaciones. En resumen, no les queda más remido que adaptar su viaje a las estaciones de recarga
Según un estudio sobre la experiencia de los usuarios de coches eléctricos e híbridos enchufables, realizado a usuarios de cinco países europeos presentado con motivo de la decimosexta edición del “Arval Mobility Observatory”, las tres principales razones de compra de un eléctrico son: el ahorro en combustible (74%), la sensibilidad ecológica (67%) y, la tecnología avanzada (66%). Sin embargo, si analizamos el mercado de los coches eléctricos, éste tiene dos grandes problemas. El primero de ellos es, sin duda, su elevado precio, de ahí que ACEA, la patronal que engloba a los 15 mayores productores europeos esté avisando de que la movilidad debería resultar “asequible” para todos los europeos y que, los vehículos eléctricos están fuera del alcance de muchos europeos. El segundo gran problema al que s enfrentan los coches eléctricos es su recarga, a pesar de que según el citado estudio, la mayoría de los usuarios de vehículos BEV (66%) no sufren lo que se conoce como “range anxiety” es decir, la ansiedad por la distancia a recorrer antes de agotar la batería. Esto último se entiende, pues el “commuting” en viajes urbanos es el principal motivo de uso de los vehículos 100% eléctricos (BEV), siendo los principales trayectos el de casa al trabajo (76%) y las compras de fin de semana (64%) seguidos del tiempo libre (61%), ocio y vacaciones (46%), llevar a los niños al colegio (41%) y los viajes de negocios (26%). Y, ¿donde recargan estos usuarios sus coches eléctricos?, pues según el estudio, la gran mayoría (84%) de los usuarios de vehículos eléctricos (BEV + PHEV) cargan su vehículo eléctrico en casa o en el garaje particular, con escaso uso de puntos públicos (26%) o de las infraestructuras en los centros de trabajo (11%).Todo esto esta muy bien, si tienes un garaje particular, pero ¿qué pasa con los miles de coches cuyos propietarios no tienen un garaje y tienen que aparcarlos en la calle? Por otro lado, esos que dicen no sufrir la “range anxiety”, resulta que a la hora de realizar un viaje de larga distancia, el 39% adapta la ruta a la ubicación de estaciones, el 36% recurre a apps de navegación y, el 24% contacta previamente con estaciones. En resumen, no les queda más remido que adaptar su viaje a las estaciones de recarga.