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Mercedes-AMG SL 63 S E PERFORMANCE, el SL más potente

Mercedes-AMG SL 63 S E PERFORMANCE, el SL más potente

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Hace dos años., Mercedes se propuso devolver el esplendor perdido a las míticas siglas SL (acrónimo formado por las iniciales de “Súper” y “Ligero”), que debutaron hace ya casi setenta años con el 300 SL y, para ello, presentó el Mercedes-AMG SL, disponible en dos versiones: SL 55 4MATIC+ de 476 CV y, el SL 63 4MATIC+ de 585 CV como tope de gama. Ahora, la marca corona la serie SL con el nuevo SL 63 S E PERFORMANCE, versión que combina un motor de gasolina con otro híbrido enchufable con los que genera 816 CV y un par motor máximo de hasta 1.420 Nm, lo que le convierte en el SL más potente de todos los tiempos.

 

El SL 63 S E PERFORMANCE está equipado con el motor biturbo AMG V8 de 4.0 litros de 612 CV y 850 Nm de par motor situado en el eje delantero, que se combina con otro eléctrico de 150 kW (204 CV), que en su conjunto desarrollan 816 CV con un par motor máximo de hasta 1.420 Nm. Asociado a un cambio AMG SPEEDSHIFT MCT 9G, el SL 63 S E PERFORMANCE acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 317 km/h, todo ello con tracción integral AMG Performance 4MATIC+ con reparto variable

 

Con 816 CV, el nuevo Mercedes-AMG SL 63 S E PERFORMANCE es el SL más potente

 

Pequeños detalles exteriores que lo distinguen como el tope de gama

 

El rasgo más identificativo de esta versión lo encontramos en la parte trasera, donde encontramos la tapa de carga integrada y el nombre del modelo resaltado en rojo, así como uno embellecedores trapezoidales dobles en los tubos de escape ranurados en el exterior.  En su lateral encontramos el distintivo “E PERFORMANCE” así como sus llantas de aleación AMG multirradio de 20” optimizadas aerodinámicamente y pintadas en negro mate con acabado de alto brillo que montan ruedas 265/40 en el eje delantero y 295/35 en el eje trasero. Cuanta además con elementos aerodinámicos activos, como el situado en los bajos de la carrocería delante del motor, que reacciona a la posición de los programas de conducción AMG y se extiende automáticamente hacia abajo unos 40 mm a partir de los 80 km/h, creando el denominado efecto Venturi que adhiere el automóvil a la calzada y reduce la elevación del eje delantero. Por su parte, el alerón trasero extensible integrado en la tapa del maletero cambia de posición en función de las condiciones de conducción y así, a partir de los 80 km/h,  adopta cinco nuevas posiciones angulares para optimizar la estabilidad de marcha o reducir la resistencia al aire.

 

En el apartado de frenos y, en consonancia con sus prestaciones, d serie viene equipado con frenos cerámicos de alto rendimiento AMG de material compuesto, con pinzas fijas de 6 pistones de color bronce delante y pinzas flotantes de 1 pistón detrás. En comparación con los modelos AMG con motor de combustión pura, los discos de freno carbonocerámicos son de mayor tamaño: 420 x 40 mm en ele eje delantero y 380 x 32 mm en ele trasero

 

El rasgo más identificativo de esta versión lo encontramos en la parte trasera, donde encontramos la tapa de carga integrada y el nombre del modelo resaltado en rojo

 

Interior de lujo, pero sin olvidar la deportividad

 

El interior está pensado tanto para los clientes que buscan la deportividad como para los que valoran el máximo confort. En él destacan sus asientos deportivos AMG de ajuste eléctrico que, opcionalmente, se pueden sustituir por los asientos AMG Performance con reposacabezas integrados y aberturas de ventilación en los respaldos. Tres programas de masaje garantizan un excelente confort para largas distancias, que puede aumentarse aún más con el paquete ENERGIZING Plus, que combina funciones para los asientos y ambientes luminosos para crear relajantes programas de confort. Cuanta además con una amplia selección de tapicerías, que van desde el cuero Nappa de uno y dos tonos, la tapicería MANUFAKTUR especialmente elegante en cuero Nappa con acolchado de rombos o, la combinación de cuero Nappa con microfibra MICROCUT y pespuntes de contraste en amarillo o rojo. Por su parte, el sistema multimedia MBUX (Mercedes-Benz User Experience) cuenta con numerosas indicaciones y funciones específicas para AMG e híbridos, como por ejemplo, la velocidad, la potencia, el par y la temperatura del propulsor eléctrico.

 

El rasgo más identificativo de esta versión lo encontramos en la parte trasera, donde encontramos la tapa de carga integrada y el nombre del modelo resaltado en rojo, así como uno embellecedores trapezoidales dobles en los tubos de escape ranurados en el exterior.  En su lateral encontramos el distintivo “E PERFORMANCE” así como sus llantas de aleación AMG multirradio de 20” optimizadas aerodinámicamente y pintadas en negro mate con acabado de alto brillo que montan ruedas 265/40 en el eje delantero y 295/35 en el eje trasero

 

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El interior está pensado tanto para los clientes que buscan la deportividad como para los que valoran el máximo confort

 

Motor de combustión en la parte delantera, motor eléctrico en la parte trasera

 

El SL 63 S E PERFORMANCE está equipado con el motor biturbo AMG V8 de 4.0 litros de 612 CV y 850 Nm de par motor situado en el eje delantero, que se combina con otro eléctrico de 150 kW (204 CV), que en su conjunto desarrollan 816 CV con un par motor máximo de hasta 1.420 Nm. Asociado a un cambio AMG SPEEDSHIFT MCT 9G, el SL 63 S E PERFORMANCE acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 317 km/h, todo ello con tracción integral AMG Performance 4MATIC+ con reparto variable. La batería ligera de alto rendimiento está situada en la parte trasera, encima del eje trasero, una batería de 6,1 kWh, cuyo sistema de almacenamiento de energía de iones de litio se inspira en tecnologías probadas en los monoplazas del equipo Mercedes-AMG Petronas F1 Team y que le otorga una autonomía de sólo 13 kilómetros y es que, está diseñada para suministrar y consumir energía con rapidez y no para ofrecer la mayor autonomía posible. La carga con corriente alterna se puede realizar a través del cargador de a bordo de 3,7 kW equipado en una estación de carga, un wallbox o un enchufe doméstico. El conductor tiene a su disposición ocho programas de conducción en el AMG DYNAMIC SELECT: “Electric”, “Battery Hold”, “Comfort”, “Smoothness”, “Sport”, “Sport+”, “RACE” e “Individual”, así como cuatro niveles diferentes de potencia de regeneración mediante el botón derecho del volante AMG.

 

Ahora, la marca corona la serie SL con el nuevo SL 63 S E PERFORMANCE, versión que combina un motor de gasolina con otro híbrido enchufable con los que genera 816 CV y un par motor máximo de hasta 1.420 Nm, lo que le convierte en el SL más potente de todos los tiempos

 

El equipo de frenos cerámicos de alto rendimiento AMG de material compuesto cuenta con discos de freno carbonocerámicos de 420 x 40 mm en el eje delantero y 380 x 32 mm en el eje trasero son de

De serie, viene además con el tren de rodaje AMG ACTIVE RIDE CONTROL con estabilización semiactiva del balanceo y los amortiguadores, regulables en rebote y compresión, disponen también de elementos hidráulicos semiactivos interconectados. Esta tecnología permite reducir los movimientos de balanceo de la carrocería y ofrecer una amplia gama de programas de conducción. También de serie, está equipado con dirección activa del eje trasero, de tal manera que en función de la velocidad, las ruedas traseras giran en sentido contrario (hasta 100 km/h) o en el mismo sentido (a más de 100 km/h) que las delanteras. En el apartado de frenos y, en consonancia con sus prestaciones, d serie viene equipado con frenos cerámicos de alto rendimiento AMG de material compuesto, con pinzas fijas de 6 pistones de color bronce delante y pinzas flotantes de 1 pistón detrás. En comparación con los modelos AMG con motor de combustión pura, los discos de freno carbonocerámicos son de mayor tamaño: 420 x 40 mm en ele eje delantero y 380 x 32 mm en ele trasero. En definitiva, el sistema de frenado impresiona por sus distancias de frenado muy cortas, así como por su eficacia máxima y su estabilidad en caso de uso intensivo, pero a la vez, destaca por su larga vida útil, así como por el ahorro de peso y la reducción de las masas no suspendidas.