Brad Pitt protagoniza un nuevo capítulo de la campaña mundial de De’Longhi, presentada con motivo del lanzamiento de su nueva y revolucionaria máquina de café superautomática Rivelia. En este episodio, Brad Pitt se ha puesto a las órdenes de Benett Miller, aclamado director de películas como Capote, Moneyball o Foxcatcher, que cuenta con dos nominaciones al Oscar a Mejor Director. Pitt es retratado en un entorno mediterráneo acogedor y pintoresco, evocando el encanto de la tradición y la excelencia italiana. El vídeo convierte al café en un lenguaje universal, en un emblema de estilo de vida, un medio de autenticidad y, en definitiva, en una parte integral de nuestra experiencia humana. Como ya quedó reflejado en el inicio de la historia de “Perfetto”, cada capítulo protagonizado por el actor gira en torno a la degustación del café a un ritmo pausado, a un abrazo deliberado a los aspectos más sutiles de la vida. Encarna la dedicación a la artesanía y la inclinación por apreciar los momentos que merecen tiempo.
Portada » Un Lancia Flaminia GT Convertibile y Brad Piit protagonistas en la última campaña de De’Longhi
En su trayecto hacia la Provenza, donde se desarrolla el metraje – concretamente en el encantador pueblo francés de Tourtour -, el actor, un amante confeso de coches y motos, se pone al volante de un modelo histórico como el Lancia Flaminia GT Convertibile, símbolo de la “Dolce Vita” y del glamour italiano de los años ´60. El Flaminia GT Convertibile fue presentado por Carrozeria Touring en el Salón de Ginebra de 1960 como versión descapotable del icónico Flaminia. Este había sido desvelado cuatro años antes y su diseño, a cargo de Pininfarina, lo convirtió en la berlina más bonita del mundo. Touring actualizó la carrocería para crear el coupé biplaza Flaminia GT, que sirvió de base para la versión descapotable que Pitt conduce en el vídeo. La primera serie del Flaminia GT Convertibile montaba un motor de 2.5 litros y seis cilindros en V, capaz de desarrollar 119 CV de potencia, aunque su mecánica se actualizaría con el lanzamiento del Flaminia 3C GT Convertibile 2.8, una versión que elevaba la potencia hasta los 150 CV. El precio de lanzamiento al mercado era de 3.200.000 liras italianas. Hasta el final de su comercialización en 1968, se produjeron 805 ejemplares, convirtiéndose en un icono de la elegancia y del placer de la conducción a cielo abierto.