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La F1 está de moda en Madrid y es que, a la exposición de la F1, parece ya inminente la confirmación oficial de la celebración del Gran Premio de F1 en la capital española. Por si esto fuese poco, el Red Bull Showrun, con Checo Pérez como piloto, visitó el pasado sábado el centro de Madrid, un espectáculo al que, a pesar de las fechas y del calor, acudieron más de 60.000 personas y es que, la oportunidad de ver en acción al RB07 y al RB08 con los que Vettel logró los títulos en 2011 y 2012 no se tienen todos los días.
Para animar el evento, que comenzó las 20´00h, Noemí de Miguel y Santi Ayala dieron la bienvenida a los asistentes que llevaba ya varias horas de pie. El evento comenzó con una competición de Karts, cuyas previas tuvieron lugar en el Karting de Carlos Sainz, en que participaron una serie de YouTubers o influencers, entre los que sorprendente, se encontraba Dani Clos. Decimos sorprendentemente, porque obviamente, aunque ahora se dedica a subir contenidos a Internet, no deja de ser un piloto profesional, así que como era de esperar, se impuso sin ningún problema en la carrera (hubiese estado mejor si la competición hubiese sido entre deportistas de Red Bull, como Dani Sordo o Marc Maárquez, presentes en el evento). A continuación hubo un duelo rapero supuestamente “improvisado” entre Arkano y Errecé (decimos supuestamente, porque a pesar de que preguntaron a algunos asistentes al azar sobre un tema, éstos no resultaron tan aleatorios: un hermano y un DJ, al que luego se le vio dando instrucciones para que terminasen). Mientras tanto, las miradas se centraban también en el cielo (ya se sabe eso de “Red Bull te da alas”) y es que, Horacio Llorens, el rey del parapente acrobático español junto a otro paracaidista acrobático, hacían de las suyas hasta que finalmente, llegaron a tierra con nada mas y nada menos que, el volante del RB7 para Checo Pérez. Como apartijo a su exhibición, Cristina Gutierrez salió con su Can-Am, del Dakar e intentó animar a los espectadores, pero su coche no era precisamente el más adecuado para el recorrido (no había un salto como cuando la exhibición de Sainz con el Audi RS Q e-tron E2). Finalmente llegó el momento y Checo Pérez dio varias vueltas al circuito en la primera de sus tres pasadas. Como era de esperar el RB7 ensordeció a todos los allí presentes, que disfrutaron viéndole hacer “donuts”.
Tras su primera exhibición, le tocó el turno a Elias Hountondji, miembro de los Driftbrothers, que incluso saludando con la puerta abierta, dejó a todos impresionados con su control sobre el BMW M4 mientras hacia drifting. Tras él y ya con la noche comenzando caer sobre Madrid, Checo Pérez volvió a salir, pero esta vez con el RB8, tras lo cual, de nuevo se vio a Elias Hountondji en acción. Pasadas las once la noche, Checo Pérez se montó por última vez en el RB8 para dar su tercera y última exhibición, que termino saludando los asistentes subido a un MINI cabrio. Está claro que esta exhibición, no sólo va a dejar huella a los que la vivieron en directo, sino también sobre el asfalto, que entre Checo Pérez y Elias Hountondji, quedó marcado con numeroso marcas negras que servirán de recuerdo.
