Según datos de Naciones Unidas, cada año se cosechan más de 700 millones de toneladas de arroz en todo el mundo. Durante el proceso de molienda, la cáscara exterior protectora, o cáscara, se separa del grano de arroz y se desecha. Para reducir la cantidad de residuos que se envían a los vertederos, las cáscaras de arroz a menudo se queman para generar electricidad, dejando un subproducto rico en sílice conocido como ceniza de cáscara de arroz (RHA, por sus siglas en inglés).
Si bien se usa predominantemente en la producción de vidrio, Goodyear, que comenzó a explorar el uso de sílice RHA en 2013 ha descubierto que en su forma más fina mezclado con caucho fortalece la banda de rodadura de los neumáticos y reduce la resistencia a la rodadura, mejorando así el ahorro de combustible y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. Es por ello que la sílice RHA ahora está oficialmente incluida en la cartera de materiales de Goodyear y se utiliza en varias de sus plantas de fabricación globales, para lo que está está trabajando en estrecha colaboración con sus proveedores para expandir aún más el uso de sílice RHA y se ha fijado el objetivo de duplicar su uso para 2021.