+26Dietrich Mateschitz, un genio del marketing que apostó por la F1
Dietrich Mateschitz, un genio del marketing que apostó por la F1
El mundo del deporte y especialmente, el del motor, deben mucho a Dietrich Mateschitz, un empresario austriaco, aunque de origen croata, experto en marketing que acabó fundando Red Bull. Gracias a unas creativas campañas de marketing y al patrocinio de una gran variedad de deportes extremos, acabó convirtiéndose en líder mundial del mercado de las bebidas energéticas. Así, Red Bull no sólo tiene su escudería de F1 (más AlphaTauri) sino que, además, es dueño de varios equipos de fútbol como el Red Bull de Salzburgo o el RB Leipzig de la Bundesliga alemana, Es además, patrocinador de una gran variedad de eventos (incluido los esports) y, sólo en España, patrocina a 38 deportistas, entre ellos, Carlos Sainz, Cristina Gutiérrez o Dani Sordo. Desgraciadamente y, coincidiendo con el GP de EE UU. en el que Red Bull se proclamó Campeón del Mundo de Constructores, Dietrich Mateschitz fallecía los 78 años de edad.
Fue en 1995 cuando por primera el logo y el nombre de Red Bull ligado a un equipo apareció en un F1, concretamente en el Sauber C14 de Frentzen y Boullion, temporada en la que el equipo terminó en 7ª posición con 18 puntos y un podio en el GP de Italia. Su alianza con el equipo suizo terminó a la conclusión de la temporada de 2004 y, tras comprar Jaguar, en 2005 debutaría el equipo Red Bull Racing
El origen de Red Bull hay que buscarlo en Tailandia, donde Chaleo Yoovidhya, un empresario tailandés había creado una bebida llamada Krating Daeng con la imagen de dos gauss, unos animales bovinos típicos de Asia, y los coloreó de rojo y azul sobre un fondo blanco y azul con la intención de transmitir dinamismo, fuerza, energía y vitalidad. Como consecuencia de un viaje de trabajo a Tailandia en el que Mateschitz probó la bebida, se puso en contacto con Yoovidhya y, en 1984 se fundaría Red Bull GmbH, empresa en la que cada uno tendría el 49% de la compañía y el restante 2% estaría en manos de Chalerm, el hijo de Yoovidhya. Después de varias pruebas buscando adaptar el sabor de la bebida y refinar el concepto a los gustos, la cultura y las características de un público muy diferente al que se dirigía el Krating Daeng, finalmente, en 1987 se lanzó en Austria Red Bull con su icónica lata delgada y azulada, pero con el mismo logo. Si bien al principio la bebida no fue muy popular, su llegada a EE.UU. en 1987 envuelta en una gigantesca campaña publicitaria que creó una marca dirigida principalmente al público joven (se llegó incluso a entregar muestras de producto gratuitamente) y enfocada a los deportes extremos, hizo que no tárdese en hacerse popular. El gran acierto de Dietrich Mateschitz fue llamar a su compuesto asiático “una bebida energética” y, su segundo gran acierto fue reinvertir todos sus beneficios en branding.
Seria precisamente Toro Rosso el que daría a Red Bull su primera victoria, cuando un jovencito Vettel no sólo logró la pole, sino también la victoria en un Gran Premio de Italia pasado por agua. Red Bull Racing tuvo que esperar hasta 2009 para lograr su primera victoria de la mano de Vettel en el GP de China, la primera de las seis que lograría el equipo esa temporada como preámbulo de lo que estaba por llegar: 4 títulos mundiales seguidos
Fue en 1989 cuando Red Bull comenzó a usar otra de sus muy efectivas estrategias que sigue aplicando hoy en día: el patrocinio de jóvenes deportistas en disciplinas de alto riesgo. El primero de ellos fue precisamente el austriaco Gerhard Berger, piloto de F1, lo que dio inicio a una asociación con este deporte en la que no sólo es dueña de dos equipos: Red Bull Racing y AlphaTauri (antes ToroRoss) con los que ha logrado 6 títulos de pilotos y 5 de constructores. Fue en 1995 cuando por primera el logo y el nombre de Red Bull ligado a un equipo apareció en un F1, concretamente en el Sauber C14 de Frentzen y Boullion, temporada en la que el equipo terminó en 7ª posición con 18 puntos y un podio en el GP de Italia. Su alianza con el equipo suizo terminó a la conclusión de la temporada de 2004 y, tras comprar Jaguar, en 2005 debutaría el equipo Red Bull Racing. El RB1 con motor Cosworth fue el primer monoplaza de Red Bull Racing en competir en la F1 de la mano de Coulthard, el austriaco Klien y el italiano Liuzzi, temporada en la que terminó en séptima posición con 34 puntos. Su mejor resultado fue el cuarto puesto logrado por Coulthard en el Gran Premio de Australia y en el Gran Premio de Europa. Como curiosidad, en el GP de Mónaco, el RB1 apareció decorado con publidad de Star Wars Episiodo III. En su segundo año, el equipo logró subir al podio por primera vez, fue en el GP de Mónaco con el tercer puesto de Coulthard, carrera en la que no sólo pudimos ver al RB2 con publicidad de la nueva película de Superman, sino que además, vimos a Adrian Horner tirarse a la piscina con la capa de Superman para celebrar este primer podio. Ese mismo año, debutó Toro Rosso, su segundo fruto de la compra de Minardi. Liuzzi y Speed fueron los pilotos encargados de pilotar el STR1 con motor Cosworth (el RB2 llevaba motor Ferrari).
Así, Red Bull no sólo tiene su escudería de F1 (más AlphaTauri) sino que, además, es dueño de varios equipos de fútbol como el Red Bull de Salzburgo o el RB Leipzig de la Bundesliga alemana, Es además, patrocinador de una gran variedad de eventos (incluido los esports) y, sólo en España, patrocina a 38 deportistas, entre ellos, Carlos Sainz, Cristina Gutiérrez o Dani Sordo
Seria precisamente Toro Rosso el que daría a Red Bull su primera victoria, cuando un jovencito Vettel no sólo logró la pole, sino también la victoria en un Gran Premio de Italia pasado por agua. Red Bull Racing tuvo que esperar hasta 2009 para lograr su primera victoria de la mano de Vettel en el GP de China, la primera de las seis que lograría el equipo esa temporada como preámbulo de lo que estaba por llegar: 4 títulos mundiales seguidos. El primero, el de 2010 de infaustos recuerdos para los aficionados españoles cuando en la última carrera disputada en Abu Dabi, contra pronóstico y gracias a una mala estrategia de Ferrari, Vettel se llevó el título. 2011 fue un paseo para Vettel, que logró 11 victorias en 19 carreras (más seis podios más). En 2012, Alonso y Vettel fueron de nuevo los protagonistas y de nuevo, el alemán se llevó el título por sólo tres puntos gracias a los abandonos de Alonso en Bélgica y Japón. El cuarto y último doble título de esta hegemonía de Red Bull fue en 2013, la última de los motores V8 no híbridos y en la que, una vez más, fue un paseo para Vettel con 13 victorias. 2016 vería el debut de Sainz en Toro Rosso, equipo que en 2020 paso a denominarse AlphaTauri para promocionar la marca de ropa del mismo nombre. Curiosamente y, al igual que Toro Rosso, el equipo lograría su primera victoria en Monza. Red Bull tendría que esperar hasta 2021 para que, en final agónica digno de película,el equipo logrease el tíutulo de pilotos de la mano de Verstappen (el titulo de constructores sería una vez más para Mercedes). Este año, Verstappen ha vuelto a ganar el título con 13 victorias y Red Bull Racing se ha proclamado campeón por quinta vez, un día después de la muerte de Dietrich Mateschitz.
Si bien al principio la bebida no fue muy popular, su llegada a EE.UU. en 1987 envuelta en una gigantesca campaña publicitaria que creó una marca dirigida principalmente al público joven (se llegó incluso a entregar muestras de producto gratuitamente) y enfocada a los deportes extremos, hizo que no tárdese en hacerse popular. El gran acierto de Dietrich Mateschitz fue llamar a su compuesto asiático “una bebida energética” y, su segundo gran acierto fue reinvertir todos sus beneficios en branding
