El entonces Presidente de la República Francesa, Giscard d’Estaing pidió a Peugeot que tomando como base el Peugeot 604, hiciese una versión limusina para utilizarlo como coche representativo de la Presidencia de la República Francesa. El primer prototipo se presentó en 1978 pero su producción no comenzó hasta finales de 1979 y a principios de 1980 ya había disponibles una decena de unidades realizadas sobre la base del 604 SL, 604 D turbo y 604 TI. Esa misma primavera, la red comercial de la marca comenzó a recibir los primeros pedidos de la versión alargada, pero la homologación oficial de la motorización no llegó hasta mitad de junio, por lo que las primeras entregas a los clientes no se realizaron hasta julio.
El 2 de junio, Juan Pablo II tenía previsto llevar a cabo una visita a la ciudad de Lisieux, en Normandía para rezar y rendir homenaje a Santa Teresa de Lisieux y Giscard d’Estaing pidió a Peugeot una versión especial del Peugeot 604 Limousine
Ese mes, concretamente, el día 2 de junio, Juan Pablo II tenía previsto llevar a cabo una visita a la ciudad de Lisieux, en Normandía para rezar y rendir homenaje a Santa Teresa de Lisieux dentro de la gran basílica dedicada a ella en 1937 y Giscard d’Estaing pidió a Peugeot una versión especial del Peugeot 604 Limousine a fin de que su Santidad la pudiese utilizar durante sus desplazamiento. Para cumplir con esta solicitud, Peugeot envió al carrocero Heuliez la unidad con número 9500010 para que éste, llevase a cabo las oportunas modificaciones: instalar un techo corredizo, una barra de sujeción interna y una tarima en lugar de los asientos plegables. La unidad en cuestión estuvo terminada justo a tiempo para la visita de su Santidad, pero había un problema y es que todavía no estaba homologado su motor, por lo que se le colocó una placa de matrícula temporal, así, ese día fue la primera vez que se pudo ver a un Peugeot 604 Limousine desfilar por carretera en un evento público.
Finalizada la vista de Juan Pablo II la unidad regresó a Heuliez para que volviese a su estado original y se vendió como vehículo de segunda mano
Finalizada la vista de Juan Pablo II la unidad regresó a Heuliez para que volviese a su estado original y se vendió como vehículo de segunda mano. En la década de los 90’ acabó en Marsella reconvertido en una limusina blanca de estilo americano con una falsa antena de televisión en forma de boomerang en el capó trasero, para llevar a jóvenes recién casados, aunque afortunadamente, mantuvo su interior original en excelentes condiciones, así como el motor PRV de 2.664 cm3 caracterizado por el ángulo particular de 90 °. In extremis, fue rescatado por un fan que la guardó en la bodega de un pequeño productor de champán en la región de Champagne Ardenne, donde fue olvidado por un tiempo en medio de botellas de vino. Afortunadamente, acabó siendo rescatada y llegó a la Toscana, a la Galerie Peugeot, donde fue inmediatamente sometido a una importante restauración. Pero nadie conocía la verdadera historia de ese chasis tan particular, que hasta entonces había estado oculto entre los documentos de la época. Fue gracias a la curiosidad de un miembro del Club Peugeot 604, que visitó la sede de Heuliez para estudiar toda la documentación relacionada con estas limusinas y descubrió la verdadera historia de esta unidad. Hoy, el Peugeot 604 Limousine Heuliez con chasis número 10 se exhibe con su uniforme original en la Galería Peugeot de San Gimignano.
El Presidente de la República Francesa, Giscard d’Estaing pidió a Peugeot que tomando como base el Peugeot 604, hiciese una versión limusina para utilizarlo como coche representativo de la Presidencia de la República Francesa
